Delincuentes ingresaron este martes a la iglesia catedral de Lomas de Zamora, ubicada a escasos metros del palacio municipal, una zona supuestamente monitoreada, y destruyeron imágenes religiosas presentes en el templo, profanando también el Sagrario del mismo.
El hecho también incluyó el robo de las coronas de la imagen de la Virgen de la Paz y del Niño Jesús, ubicadas en el centro del altar y la destrucción de la cruz del cinerario parroquial.
Los atacantes también desparramaron las hostias por el altar en otro gesto de ofensa a la religión cristiana.
El repudiable hecho se conoció cuando las servidoras de Cáritas ingresaron al templo al comenzar la actividad del día.
La coronación de la Virgen de la Paz y del Niño Jesús, se había realizado el 22 de agosto de 2010, en conmemoración de los 150 años de la creación de la catedral de Lomas de Zamora, cuya construcción se inició en 1860.
El ataque al templo de la comunidad católica se suma al ocurrido a principios de noviembre pasado en la parroquia Nuestra Señora del Luján, de la ciudad de El Bolsón, provincia de Río Negro.
La sucesión de hechos contra la fe mayoritaria de los argentinos, transcurren ante el silencio de buena parte de la clase política y los medios de comunicación. Los ataques contra la fe mayoritaria de los pueblos en Occidente, a lo largo y ancho de su extensa geografía, no pasa por una mera moda o casualidad. Como ha sabido analizar el doctor en Ciencias Políticas, Marcelo Gullo: “en el origen del poder de las naciones siempre hay una fe fundante, si le saco su fe fundante y su escala de valores empiezo a decontruir su poder popular”.