Juan Guaidó, el opositor del gobierno de Nicolás Maduro, fue acusado de ser el cómplice de la reciente incursión armada, vía marítima, ocurrida en La Guaira. Así lo confirmó el fiscal general de Venezuela, Tarek WIlliam Saab, ante la prensa. La intención sería activar un conflicto geopolítico con ayuda de Colombia y los Estados Unidos.
Saab, reveló un documento firmado por Guaidó y denunció que “En horas de la noche surgieron evidencias contundentes que vinculan directamente a Juan Guaidó como el autor intelectual. Ayer el autoproclamado afirmaba que se trataba de un montaje, específicamente lo calificó como una olla del Gobierno para confundir y sembrar evidencias”, señaló el fiscal.
Además, indicó que la reciente incursión marítima fue “apoyada y financiada desde el exterior”. Tarek WIlliam Saab advirtió incluso de que en el ataque supuestamente participó un mercenario estadounidense, un exmilitar y director ejecutivo de la empresa de seguridad Silvercorp USA, llamado Jordan Goudreau.
Según Saab, la empresa mencionada “es una contratista especializada en problemas irregulares, que presta servicios de asesoría a corporaciones en evaluación de riesgos, en negociaciones de casos de secuestros y extorsiones”. El contrato de la operación militar —que tenía por objeto derrocar al gobierno constitucional de Nicolás Maduro—, concertaba un pago de 212 millones de dólares en el cual figuran las firmas de Guaidó, del diputado Sergio Vergara y del consultor Juan José Rendón, ambos comisionados del autoproclamado mandatario.
“Han declarado todos sus planes, tenemos las pruebas, los testimonios, los videos, todas las pruebas físicas, materiales, que este grupo se entrenó en territorio colombiano, un funcionarios estadounidense ha declarado y mostró los contratos firmados por la oposición venezolana para privatizar y preparar una expedición de terroristas para asaltar a Venezuela”, concluyó Saab.
Por su parte, el embajador ruso en Caracas, Serguéi Melik-Bagdasárov, que el intento fallido de la importación ilegal de armas a Venezuela, por parte de militares de Colombia, tuvo como objetivo desestabilizar el gobierno de Nicolás Maduro.
“Se sabe bien, y ha sido repetidamente reportado en varios medios de comunicación, que en las áreas fronterizas con Venezuela hay campos de entrenamiento especial para milicias, incluyendo exsoldados venezolanos desertores, que fueron atraídos por la promesa de los 10.000 dólares”, destacó el diplomático ruso.
Melik-Bagdasárov aseguró ante la prensa que el grupo que fue neutralizado y en otros similares existen con el apoyo del extranjero.
“Tales mercenarios son productos de la fábrica del terror y el asesinato, criados con el apoyo de EEUU y sus amigos. De ellos se forman los grupos de combate, uno de los cuales ha sido neutralizado”, aseveró el embajador.
Por otro lado, la periodista Érika Ortega, corresponsal de RT en Venezuela, fue amenazada de muerte por quien maneja la cuenta de Twitter de la empresa Silvercorp USA, dirigida por Jordan Goudreau, quien confesó recientemente su participación en el intento fallido de incursión marítima al país suramericano, el pasado domingo.
“A los mercenarios se les paga. Para librar al mundo de cómplices de Maduro como tú, con mucho gusto hago este trabajo gratis”, le escribieron desde la cuenta oficial de Silvercorp USA a la periodista de RT.
El tres de mayo, el ministro del Interior venezolano, Néstor Reverol, informó sobre la prevención de un intento de aterrizaje de milicianos colombianos en el norte del país. Más tarde, el presidente de la Asamblea Nacional Constitucional de Venezuela, Diosdado Cabello, añadió que ocho atacantes fueron asesinados y dos más fueron detenidos. También se supo que uno de los detenidos era un agente de la Agencia Antidrogas de EEUU.