Ya han fallecido más de 3.450 niños en Gaza a causa de los ataques de Israel, de acuerdo con el portavoz del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), James Elder. Casi el 70% de los muertos reportados son niños y mujeres.
El funcionario aseveró este 31 de octubre que Gaza es actualmente “un infierno” para sus habitantes: “Nuestros temores más profundos sobre el número de niños asesinados que se convirtieron en decenas, luego cientos y finalmente miles, se hicieron realidad en sólo dos semanas (…) Gaza se ha convertido en un cementerio para miles de niños. Es un infierno para todos los demás”, sentenció.
Otros 1000 niños han sido reportados como desaparecidos y podrían estar atrapados o muertos bajo los escombros, a la espera de ser rescatados o recuperados.
Los menores no solo han sido víctimas de los ataques armados, sino también de la falta de agua producto del bloqueo de Israel contra la Franja de Gaza: “La capacidad de producción de agua de Gaza es apenas el 5% de su producción diaria habitual. Las muertes infantiles (especialmente de lactantes) por deshidratación son una amenaza creciente”, aseveró.
“Cuando cesen los combates, el costo para los niños y sus comunidades será soportado por las generaciones venideras. Antes de esta última escalada, se identificó que más de 800.000 niños en Gaza —tres cuartas partes de toda su población infantil— necesitaban salud mental y apoyo psicosocial”, agregó.
Ante el desolador panorama para los infantes en Gaza, el portavoz recalcó que es absolutamente necesario un alto al fuego humanitario: “Necesitamos un alto el fuego humanitario inmediato. Y todos los cruces de acceso a Gaza deben abrirse para permitir el acceso seguro, sostenido y sin obstáculos de la ayuda humanitaria, incluidos agua, alimentos, suministros médicos y combustible”, indicó.
En las últimas tres semanas han muerto más niños en Gaza que en cualquier otro conflicto del mundo desde 2019, según indica un informe de la ONG Save the Children.
