Una trabajadora sanitaria de Alaska (EEUU) sufrió una grave reacción alérgica luego de haber recibido el martes la vacuna de Pfizer-BioNTech contra el COVID-19 y debió ser hospitalizada. La afectada no había sufrido anteriormente reacciones alérgicas a ningún otro medicamento.
La noticia se difundió este miércoles a través de los diarios The New York Times y The Washington Post. En los mismos, confirmaron por un médico del hospital donde la paciente fue internada que la mujer de mediana edad no tenía antecedentes de alergias, pero tuvo una reacción anafiláctica que comenzó 10 minutos después de recibir la vacuna en el Hospital Regional Bartlett en Juneau, Alaska. La reacción le provocó enrojecimiento en la piel y falta de aliento.
Jerica Pitts, portavoz de Pfizer, declaró que la empresa aun no tiene todos los detalles del caso y está trabajando con las autoridades sanitarias locales para investigar lo sucedido.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) ha aconsejado a las personas con alergias que consulten a sus médicos para asegurarse de que no son alérgicos a ninguno de los componentes de la vacuna.
El regulador de medicamentos del Reino Unido dijo a principios de este mes, después de detectar dos informes de reacciones alérgicas graves en el país, que cualquier persona con un historial de anafilaxia a un medicamento o alimento no debería recibir la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19 .
Los científicos no saben con precisión qué componente de la nueva vacuna está implicado en la respuesta alérgica grave de Alaska y las dos británicas.