El presidente Joe Biden y cada uno de los expresidentes estadounidenses vivos, con la excepción del expresidente Donald Trump, tenían al menos un antepasado que era dueño de esclavos, según un informe de Reuters.
Reuters examinó las genealogías de los miembros de la élite política estadounidense, incluidos los presidentes actuales y anteriores, los miembros del Congreso, la Corte Suprema y los gobernadores. El examen encontró que al menos 100 miembros del último Congreso en funciones, que tenía 536 miembros, son descendientes directos de antepasados esclavistas.
Además, 28 miembros del Senado, más de una cuarta parte, pueden rastrear a sus familias hasta un antepasado propietario de esclavos.
Esto incluye a los senadores republicanos Mitch McConnell (Ky.), Lindsey Graham (SC), Tom Cotton (Ark.) y James Lankford (Okla.), y los demócratas Elizabeth Warren (Mass.), Tammy Duckworth (Ill.), Jeanne Shaheen (NH) y Maggie Hassan (NH).
El expresidente Donald Trump es el único expresidente estadounidense vivo que no desciende de esclavistas. El presidente Joe Biden y los otros expresidentes vivos (Jimmy Carter, George W. Bush, Bill Clinton y Barack Obama) descienden de antepasados que tenían esclavos.
Once gobernadores en 2022 descendían de esclavistas, al igual que dos jueces de la Corte Suprema de EE. UU.
Los antepasados esclavistas del Congreso estaban entre los más ricos de Estados Unidos antes de la Guerra Civil; las tres cuartas partes se encontraban entre el 10% más rico.
Al investigar a la élite política estadounidense, Reuters encontró los nombres de más de 700 personas esclavizadas por los antepasados de los líderes.
