Un miembro del equipo de bioética del Foro Económico Mundial (WEF sus siglas en inglés), el Dr. Matthew Liao, director del Centro de Bioética del Colegio de Salud Pública Global de la Universidad de Nueva York, propuso modificar genéticamente a los humanos para generar intolerancia a la carne y de esa manera cambiar sus hábitos alimenticios con una supuesta finalidad ecológica.
En el marco de la instalación de las directrices de la Agenda 2030 a nivel mundial y desde la mencionada entidad globalista, reapareció un video que data del año 2016 y que se viralizó en las redes sociales, donde se escucha a Liao en una conferencia en el Festival Mundial de Ciencias en la que destacó la importancia de reducir el consumo de carne como una forma efectiva de ayudar al medio ambiente: “Si las personas disminuyeran su ingesta de carne, tendría un impacto significativo en la salud del planeta”.
Y agregó: “Pero la gente no está dispuesta a renunciar a la carne. Algunas personas estarán dispuestas a hacerlo, pero otras personas pueden estar dispuestas a hacerlo, pero tienen una debilidad de voluntad. Dicen ‘este filete es demasiado jugoso, no puedo hacer eso’. Por cierto, soy uno de esos”.
El profesor estadounidense, filósofo, especializado en bioética y ética normativa, remarcó que los seres humanos naturalmente tienen ciertas intolerancias a diferentes alimentos, pero que para reducir el consumo de carne, “la Ciencia” deberá modificarlo por medio de la ingeniería genética para que el cuerpo rechace ese alimento: “Por ejemplo, tengo intolerancia a la leche. Y algunas personas son intolerantes a los cangrejos de río. Entonces, posiblemente podamos usar la ingeniería humana para demostrar que somos intolerantes a ciertos tipos de carne, a ciertos tipos de proteínas bovinas”.
“Existe una cosa llamada garrapata Lone Star que, si te muerde, te volverás alérgico a la carne. Así que eso es algo que podemos hacer a través de la ingeniería humana. Posiblemente podamos abordar problemas mundiales realmente grandes a través de la ingeniería humana”, resaltó.
En otra ocasión, específicamente en una de las cumbres anuales en Davos, se tomó como eje de debate el paper de Matthew Liao “Ingeniería humana y cambio climático” durante su discusión sobre la “Dieta de Salud Planetaria”, para comenzar con la instalación de la posibilidad de que la humanidad cambie su dieta alimentaria por otra basada en proteínas como insectos y tejido de carne sintético cultivado en laboratorio.
El FEM en su página web oficial, propone dar “un empujoncito” para que las personas consuman menos carne, argumentando cosas como: “La carne y los productos lácteos representan alrededor del 14,5% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero” y que “la inclusión de mensajes medioambientales cuidadosamente enmarcados en los menús de los restaurantes puede aumentar significativamente la aceptación por parte de los clientes de platos ricos en plantas y con menos emisiones de carbono”.
Las propuestas de Davos para "ayudar al planeta": "modificar genéticamente a los humanos" para volverlos "intolerantes a la carne". El proyecto distópico del mundo que impulsan se supera día a día. pic.twitter.com/8NkHdBDobS
— KontraInfo (@KontraInfo) August 18, 2023
