El Gobierno extrajo $86.000 millones del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la ANSES para financiar sus gastos para el crucial año electoral de 2019. El dinero de los jubilados será reemplazado por bonos (“Letras del Tesoro”) y Macri podrá usarlos para pagar deuda y financiar gastos corrientes. La medida será también una nueva bomba que podrá estallar a quien se haga cargo del próximo gobierno, ya que deberán abonarse los $86.000 millones más sus intereses en diciembre de 2019. Si se mantiene el déficit que generó la actual administración (tras la eliminación de retenciones, la baja de los aportes patronales y el aumento de la recesión que incide en menor recaudación) y que de algún modo conduce a este manotazo de ahogado a los fondos de los jubilados, semejante monto será imposible de devolver a fines de 2019 por lo que terminarán reciclándose en nuevos papelitos de colores.
“En el marco de la programación financiera para este ejercicio se ha acordado con las autoridades de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSeS) organismo descentralizado en la órbita del Ministerio de Salud y Desarrollo Social, la suscripción de Letras del Tesoro en Pesos”, informa escuetamente, y sin informar el uso que se le dará al dinero, el Boletín Oficial.
Las Letras tienen como fecha de emisión el 26 de diciembre de 2018 y de vencimiento, 26 de diciembre de 2019 (un año de plazo); la moneda de emisión y pago son los pesos y la moneda de suscripción, pesos o dólares, utilizándose para su conversión el tipo de cambio de referencia de la Comunicación “A” 3500 publicada por el Banco Central el día hábil anterior a la fecha de liquidación. La amortización íntegra al vencimiento y devengará intereses a Tasa Variable, pagaderos trimestralmente el 27 de marzo, 26 de junio, 25 de septiembre y 26 de diciembre de 2019.
No conforme con haber recortado las jubilaciones en términos reales (aumento del 28% contra inflación del 48%) el Gobierno de Macri continua vaciando los fondos de la ANSES, preparando así la insustentabilidad que favorezca su posterior reprivatización.
La liquidación del Fondo de Garantía fue además planteada en el acuerdo con el FMI que se dio a conocer en junio y luego se actualizó en octubre. Tal como hemos venido advirtiendo: van por los fondos de los jubilados.