Ante una posible respuesta iraní, después de que Israel bombardeara este lunes la sede del Consulado persa en Damasco, la capital de Siria, el Estado sionista ha cerrado 28 misiones diplomáticas en todo el mundo. Al mismo tiempo, el país hebreo reforzó su sistema de defensa antimisiles en la frontera con Líbano luego de que el grupo chiita libanés Hezbolá también prometiera “castigo y venganza” por el bombardeo en Damasco.
Las fuerzas estadounidenses e israelíes y sus embajadas en todo el mundo permanecen en alerta máxima, a la espera de la represalia.
La cadena norteamericana CBS, sostuvo que el Ejército estadounidense recibió información de que Irán está planeando un ataque de represalia que incluirá un enjambre de aviones no tripulados Shahed y misiles de crucero. Los oficiales señalan que se desconoce el momento del ataque, pero sugieren que tendrá lugar antes de que finalice el mes de Ramadán.
Por su parte, el NYT cree que es más probable que Irán ataque a Israel a que sus proxies ataquen a las tropas estadounidenses en la región.
De acuerdo con CNN, altos funcionarios de EE.UU. consideran que un ataque es “inminente”.
Hassan Nasrallah, secretario general de la organización chiita Hezbolá, afirmó que la respuesta de Irán podría llegar en cualquier momento. “Estén seguros de que la respuesta iraní al atentado en Damasco llegará inevitablemente”, dijo.
“En un mensaje escrito, la República Islámica de Irán advierte a los dirigentes estadounidenses que se abstengan de ser arrastrados a la trampa de Netanyahu: Manténganse alejados para no resultar heridos”, escribió este viernes en su cuenta de X el subjefe de Gabinete de la presidencia iraní para asuntos políticos, Mohammad Jamshidi.
Un portavoz del Departamento de Estado dijo a CBS que Estados Unidos respondió enviando una advertencia por escrito a Irán, para que no utilice el ataque israelí como “pretexto para atacar al personal y las instalaciones estadounidenses”.
La decisión sobre el ataque directo contra Israel depende del líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Hoseiní Jameneí, que es también el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, y prometió que Teherán se vengará de Israel por el asesinato de sus militares en Siria: “El régimen malvado será castigado por las manos de nuestros valientes. Haremos que se arrepientan de este crimen y de otros similares”, expresó.
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dispuesto a arrastrar a EEUU y al mundo a una guerra, declaró este jueves sobre un posible ataque iraní: “Sabremos defendernos y actuaremos según el sencillo principio de que a quien nos haga daño o planee hacérnoslo, le haremos daño”.
