Por Kim Schmitz*
El éxito de Rusia en Ucrania está alentando a Irán a deshacer décadas de política exterior hostil de Estados Unidos en Medio Oriente. Un gobierno estadounidense en bancarrota acaba de ser invitado a otra guerra.
El momento es oportuno: el gobierno de Estados Unidos se ve obligado a imprimir billones de dólares mientras lucha por recaudar nueva deuda. Otra guerra provocaría un aumento significativo de la inflación y un declive económico acelerado de Estados Unidos.
Si Irán mina el Estrecho de Ormuz, la crisis energética mundial se volvería crítica.
La administración Biden ha utilizado la mayoría de las reservas de petróleo de Estados Unidos para estabilizar los precios internos del petróleo. Irán puede aumentar significativamente el dolor para el gobierno estadounidense.
Ucrania se está convirtiendo en una gran derrota para Estados Unidos y la OTAN. Un nuevo frente en Medio Oriente aceleraría el declive de Estados Unidos.
El gobierno de Estados Unidos y sus socios occidentales simplemente no pueden permitírselo. Rusia y China serían los más beneficiados.
Irán lo entiende y está haciendo el juego a sus socios.
*También conocido como Kim Dotcom, fundador del sitio Megaupload.
