El Estado de Israel bombardea la Franja de Gaza: palestinos muertos y destrucción del canal de TV Al Aqsa

Una vez más, el cobarde ejército israelí hace abuso de su poderío militar contra los palestinos, haciendo gala de su desproporción en su fuerza bélica, con un arsenal que solo pudieron construir gracias a los millonarios subsidios de EEUU y Gran Bretaña a lo largo de décadas. En esta ocasión la aviación del régimen sionista bombardeó unas 70 posiciones y ya se han reportado alrededor de una decena de gazatíes muertos, luego de un intenso ataque a la infraestructura palestina, entre ella el canal de televisión Al Aqsa, silenciando una de las voces que podrían contarle al mundo lo que está ocurriendo.

Las bajas no han sido mayores ya que Israel utiliza el sistema de alertar con llamados telefónicos los edificios que bombardeará para lograr su previa evacuación. La entidad sionista parece así perfeccionar su sadismo aprendiendo de los acontecimientos pasados, en los que las cifras de civiles muertos generaban rápidamente el repudio mundial.

Se reportó también que aviones israelíes bombardearon las casas de tres milicianos palestinos de Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) y de Yihad Islámica y a través de las redes sociales circularon imágenes de cómo fueron derribados edificios enteros, cotejando fotos “antes” y “después”:

Vale aclarar que la destrucción de infraestructura es una forma de seguir empujando a la ya empobrecida población gazatí a la inanición o el exilio, dado el brutal bloqueo económico y de servicios a los que está sometida.

Estos hechos están ocurriendo siguiendo una dinámica parecida a la forma en la que empezaron enfrentamientos como el de 2014: Israel primero incursionó a Gaza y mató a 7 palestinos en una operación encubiertas con fuerzas especiales (entre ellas a un líder de Hamas, Nur Baraka de 37 años, perteneciente a las Brigadas Ezedin Al Qasam), a estas muertes desde Gaza se respondió con una serie de proyectiles de corto alcance que solo lograron herir a un soldado israelí mientras que el resto cayeron en lugares deshabitados o fueron interceptados por el sistema de defensa antimisiles “Cúpula de Hierro”. En venganza, Israel desplegó su poder de fuego a través de aviones bombarderos.

En los últimos meses, ya se cuentan alrededor de 220 palestinos muertos en distintas protestas contra el régimen sionista. La actual espiralización de la violencia de los últimos días ocurre llamativamente cuando se estaba negociando un acuerdo de alto al fuego de larga duración con mediación de Egipto.

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