Rusia inauguró una imponente catedral dedicada a conmemorar las grandes gestas militares en los mil años de historia de este país, entre ellas la victoria de las FFAA rusas en la Segunda Guerra Mundial, hecho del que se cumplieron 75 años. La nueva “catedral de la Resurrección de Cristo”, es el principal templo ortodoxo del Ministerio de Defensa de Rusia y está construida a 55 kilómetros de Moscú, en el parque temático Patriot. Rezos y armas se unieron en ceremonia de consagración religiosa este 14 de junio.
Si bien estaba pautado que se inaugurara el día 9 de mayo, la fecha fue pospuesta por la emergencia del coronovirus.
A la inauguración asistió el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, quien presidió el acto junto a Kiril, el patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa. También asistió la plana mayor de las Fuerzas Armadas.
Kiril, que dio las gracias a Putin por apoyar el proyecto y asumió la responsabilidad de ejercer de párroco de la catedral: “Muchos soldados murieron por la patria y en nombre de la fe. Cuando caen los bombas no hay ateístas. Y es que Dios nos da esperanza en la inmortalidad”, sostuvo.
“La hemos construido para que dure 500 años”, comentó Yevgueni Grigorkin, subjefe del proyecto de construcción.
La construcción está llena de símbolos: el diámetro del tambor de la cúpula principal tiene 19,45 metros, en honor al año 1945 en que finalizó la guerra. El campanario tiene 75 metros, la altura de la cúpula menor es de 14,18 metros, que corresponden a los 1.418 días que duró el conflicto bélico y en el iconostasio se pueden contar 48 iconos, los meses que duró la contienda.
El interior del templo incluye numerosos mosaicos representando las principales victorias militares desde que el príncipe Vladímir adoptara el cristianismo ortodoxo como religión oficial hace más de mil años (988). La gran cúpula labrada en nitruro de titanio que corona el templo en su exterior tiene la forma del casco de Alenxandr Nevski, príncipe que forjó su fama en los campos de batalla durante el siglo XIII.
Diseñada con estilo bizantino, sus principales elementos son el metal, el vidrio, los mosaicos y el granito de Karelia. La iglesia castrense es el tercer templo ortodoxo más grande del mundo, tras la catedral de Cristo Salvador de Moscú y la de San Isaak de San Petersburgo.
El templo esté presidido en su interior por una gigantesca estatua dorada de la Virgen María.
La enorme catedral, fue construida en menos de 2 años: el jefe de la Iglesia ortodoxa rusa bendijo el 19 de septiembre de 2018 la primera piedra basal en presencia del presidente, Vladímir Putin. “Ésta será la principal iglesia de nuestras fuerzas armadas, un símbolo más de nuestra invencible tradición nacional, de nuestra fidelidad a la memoria de nuestros antepasados y de sus acciones por la patria”, declaró Vladímir Putin.
Como ha explicado el analista especializado en relaciones internacionales, Marcelo Gullo: “en el origen del poder de las naciones siempre hay una fe fundante, si le saco su fe fundante y su escala de valores empiezo a decontruir su poder popular”. Putin parece tener en claro este apotegma.
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