En su paso por la Argentina, el ex presidente de Ecuador, Rafael Correa, fue entrevistado por la periodista Hinde Pomeraniec. Fue consultado por un tema sensible que se está debatiendo actualmente en nuestro país, la despenalización del aborto. Su respuesta fue tajante: “El aborto para mí es un asesinato. Y el asesinato del ser más débil, más desprotegido”. Es interesante conocer su posición para comprender que no sólo desde posturas “de derecha” se cuestiona la legalización del aborto. De hecho, fundaciones del más rancio capitalismo financiero, como la Open Society de George Soros, la Ford Foundation o la Rockefeller Foundation vienen impulsando la despenalización del aborto en todo el mundo.
Veamos la entrevista de Pomeraniec a Correa:
— Le voy a hacer una pregunta ya más de orden social. Hace unos años usted mantuvo un debate
interno con las mujeres de su partido por la despenalización del aborto. Usted es una persona
creyente, religiosa, está en contra de la despenalización, y éste es un momento en el cual no solo en
la Argentina sino en diversos países se comienza a discutir el tema, incluso países católicos como
Irlanda. Me gustaría escuchar su opinión.
— No creo que se trate de ser católico o no, son convicciones que van más allá de la creencia de uno.
Gandhi decía: “Quién puede dudar de que el aborto es un asesinato”. Gandhi no es que era cristiano, no es
que seguía los principios morales de la Iglesia Católica. Yo respeto mucho otras opiniones pero ese
enfrentamiento, siempre hubo un debate interno. Y eso es democracia. El enfrentamiento fue por otro
problema. Habíamos quedado en sacar ese tema, que es tremendamente sensible, de un nuevo cuerpo
legal que se estaba discutiendo –me parece que era el Código Penal, el Código Integral Penal-. Después de
llegar a un acuerdo con esas compañeras, ellas rompen el acuerdo y lo meten y nos crean un problema
político. Entonces, se sanciona a esas compañeras por eso, por no haber respetado el acuerdo, como ellas
lo reconocieron luego. Pero todo fue tergiversado por la prensa diciendo que, como no estaban de acuerdo
conmigo, entonces las perseguimos. No es cierto: se llegó a un acuerdo y se rompió la disciplina partidista al
haber roto ese acuerdo. En todo caso usted sabe cuál es mi posición al respecto.
— Sí.
— Respeto todas las posiciones en contrario pero yo soy también de esa línea de Gandhi, el aborto para mí
es un asesinato. Y el asesinato del ser más débil, más desprotegido.
— Entonces, si usted fuera presidente hoy y su Congreso tratara la despenalización y la aprobara,
¿la vetaría?
— Sí.
— Es decir que no sería presidente en un país que tuviera el aborto despenalizado o legalizado.
— No sería el presidente que diera paso a aquello.
— Suena fuerte.
— Prefiero irme a mi casa.
— Muy fuerte.
— Sí, hay convicciones que son inclaudicables, ¿no?
Puede leerse la entrevista completa acá.