De acuerdo a lo informado por la Oficina Anticorrupción, Mauricio Macri terminó el año 2018 con un aumento de su patrimonio del 52%, pasando de $99.876.155 a $151.688.684. Coherente con sus políticas de especulación financiera, el 75% de la riqueza en blanco de Macri se encuentra invertida en títulos y bonos de deuda.
Macri declara ser dueño de 7 inmuebles por $26.248.116 pesos. Seis en la Argentina por $11.248.116 y uno en Uruguay por $15 millones. Los datos no incluyen los bienes incluidos en el “fideicomiso ciego”. El aumento de un 52% en términos nominales le permitió mantener el valor de sus bienes frente a la inflación
La fortuna de los Macri en blanco es solo un ínfimo porcentaje, como quedó demostrado en los Panama Papers con los movimientos de dinero en negro a través de paraísos fiscales y los millones que su propia familia aceptó que había tenido por fuera del sistema legal en el último blanqueo impositivo.
El director de la Agencia Federal de Inteligencia, Gustavo Arribas, incrementó su patrimonio un 94%, declarando $245 millones de pesos para 2018. Dispone de dos terrenos en San Martín de los Andes, tres propiedades en la CABA, cinco propiedades en San Pablo, Brasil. Suma también $41,6 millones en el fideicomiso Vías de Ocampo, $57 millones en un depósito en el exterior con ubicación no especificada y $97 millones en acciones.
Al actual ministro de Hacienda, y ex periodista del Grupo Clarín, Nicolás Dujovne, tampoco le fue nada mal. Solo en 2018 aumentó su patrimonio un 80%, declarando $218.354.834 pesos, repartidos en bonos, acciones, depósitos y propiedades. Del total, una buena parte, permanece fuera del país: $1.604.071 dólares en bancos de EEUU y Uruguay; $1.053.562 en la sociedad Florentine Global de Islas Vírgenes; acciones en las sociedades uruguayas Para Bien S.A. y Jilym Company S.A; un terreno en el vecino país rioplatense por $12 millones de pesos y una casa en la localidad charrúa de José Ignacio por $36 millones.
El ministro de Hacienda, a dos años y medios de su inicio de gestión sigue optando por no creer en las posibilidades económicas de su país, dejando buena parte de su patrimonio en el exterior, mal no le fue.
Comparando su declaración jurada con la de Mauricio Macri, cabe preguntarse: ¿cómo hizo un periodista para amasar una fortuna de más de $200 millones en blanco? ¿cómo puede ser que Dujovne tenga un patrimonio un 43% más grande que el propio Macri? Obviamente los números no cierran.
A Dujovne le siguen en el gabinete, los fabulosos incrementos de los patrimonios de Oscar Aguad, de $6.433.838 a $11.452.002; Patricia Bullrich, de $5.964.512 a $11.807.749; de Germán Garavano, de $6.285.675 a 13.710.622; y Jorge Faurie, de $12.588.744 a $23.999.306. La clave en todos estos casos ha sido el no confiar en la propuesta económica de su propio gobierno y mantener sus activos en dólares en medio de la brutal devaluación de 2018.
Al promedio de los argentinos no le fue tan bien como al gabinete gobernante. Los salarios perdieron 18% contra la inflación y el Producto Bruto Interno de nuestro país cayó un 2,5% durante 2018. En el actual modelo, una casta de millonarios multiplica su riqueza a costa de empobrecer al conjunto de la sociedad.