Hillary y el príncipe Andrew citados a declarar ante la Justicia de EEUU | Por Alfredo Jalife Rahme

Por Alfredo Jalife-Rahme

Trump se encuentra en la parte más álgida de su presidencia, mucho peor que durante el impeachment que sorteó, con el asedio concertado y concentrado de Antifa y BLM (Black Lives Matter), financiados por el megaespeculador George Soros y la Fundación Clinton, mientras que en forma “coincidente”, la polémica Hillary Clinton ha sido obligada a acudir ante el juzgado por el uso ilegal de material sensitivo del gobierno, en la etapa de Obama, en su correo electrónico privado cuando fungía como Secretaria de Estado.

Hillary perdió el recurso para no asistir al citatorio judicial y ahora tendrá que comparecer el 9 de septiembre: dos meses antes de las candentes elecciones de EEUU que arrojarán lumbre.

Hillary, quien fue considerada entre las 10 mejores abogadas de EEUU, conoce perfectamente las implicaciones escandalosas de los correos que borró y que la involucraban en el derrocamiento del ex-mandatario libio Gadafi (https://bit.ly/37hB1jY).

La demanda contra Hillary fue presentada por el grupo Judicial Watch que defiende causas “conservadoras”.

En fechas recientes han arreciado los ataques en Fox News por la probable implicación del marido de Hillary, el ex-presidente Bill, en el presunto asesinato del pedófilo multitudinario Jeffrey Epstein.

También en forma “coincidente”, el Príncipe británico Andrew acaba de volver a ser citado por la justicia estadunidense para aportar su testimonio sobre su presunta colusión en la red de pedofilia del malhadado Epstein.

El procurador estadunidense Geoffrey Berman acusó sin tapujos al Príncipe británico Andrew de ignorar sus citatorios al ser interrogado, mientras que el bufete de abogados que defienden al mancillado Príncipe alegan que están dispuestos a comparecer a un complicado interrogatorio por “escrito” cuando el procurador Berman lo desea interrogar “cara a cara (http://dailym.ai/3cSaZoK)”.

A mi juicio, los citatorios judiciales de Hillary y del príncipe británico tienen de común denominador exponer la fetidez de la pedofilia de Epstein, quien, curiosamente, era también íntimo de Trump, y cuyo escabroso caso deja peor parados a los Clinton y al Príncipe Andrew que al propio presidente.

El caso repelente de los Clinton es meramente doméstico, mientras que con el Príncipe Andrew cobra una dimensión geopolítica cuando los bancos británicos HSBC y Standard Chartered acaban de reconocer la soberanía de China sobre la ex-colonia inglesa de Hong Kong, lo cual exasperó al Secretario de Estado Mike Pence, quien no ocultó su irritación.

http://alfredojalife.com

https://www.facebook.com/AlfredoJalife

http://vk.com/id254048037

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.