El procurador bonaerense, Julio Conte Grand, confirmó que la autopsia preliminar al militante de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) Rodolfo Orellana determinó que murió por el impacto de “un proyectil de arma de fuego”. También aclaró que: “se acercaron efectivos de seccionales cercanas en dos patrulleros, con policías que estamos investigando si tenían armas de fuego”.
“La autopsia preliminar determina el ingreso de un proyectil de arma de fuego por la zona del omóplato, en la espalda y con salida por la zona facial a la altura de la nariz”, afirmó Conte Grand. Según contó al canal de noticias C5N, “esta autopsia no puede determinar el calibre del proyectil porque no quedó dentro” del cuerpo.
Esto desmiente la primera versión que había hecho circular la policía en la que se sugería que al no haber proyectil la herida hacía sido producto de un objeto punzante en medio de un enfrentamiento entre dos grupos y se citará a la médica de la guardia del hospital Alberto Balestrini, quien “indicó que solo pudo verificar la existencia de una lesión en el cuerpo compatible con un elemento punzante”.
El dirigente social del MTE que participa de la CTEP, Juan Grabois, afirmó: “Rodolfo Orellana, de la OLP-CTEP, fue fusilado por la policía en un conflicto de tierras en Celina. La gente está desesperada en todo el país, sin trabajo, sin techo, no pueden alquilar y comer a la vez. El gobierno solo aumenta la Crueldad”.
Orellana tenía 36 años, vivía en Villa Celina, trabajaba en el rubro textil y era padre de cinco hijos. Fue asesinado el jueves alrededor de las 6 de la madrugada en un predio de tierras fiscales ubicado en la ruta 4 y autopista Ricchieri, en el oeste del Conurbano, en el contexto de una toma de tierras por parte de unas 100 familias y la consiguiente represión policial: “Varios testigos nos contaron que cuando llegaron al lugar de la toma, se acercaron dos patrulleros, desde donde les dijeron que si querían guerra la iban a tener. Con los patrulleros había además un civil que opinaba y no estaba identificado como policía; no sabemos quién era. Cuando la gente empezó a caminar masivamente para entrar a las tierra, la policía empezó a dispararles. Todos los compañeros identifican a una mujer policia rubia como una de las que disparaban. Ahí cayó nuestro compañero”, contó Pablo Puebla, de la Organización Libres del Pueblo (OLP).
“La toma la comenzaron ayer a la madrugada vecinos y vecinas de la zona, ayer a la madrugada. Son lotes que estan ahí al costado de Puente 12 y Camino de Cintura”, detalló a ANRed el dirigente Ignacio Matos, referente de la OLP Simón Bolívar-Ctep: “Primero llegan algunos policías con balas de goma, y luego más de 30 efectivos de la policía con balas de plomo. Al compañero nuestro le pegan un tiro en la boca y en la espalda y acaban con su vida“.
La triste situación es una expresión del enorme problema habitacional que padece la Argentina, producto de los altos valores de terrenos, propiedades y alquilares, fruto a su vez de la especulación financiera inmobiliaria sin ningún tipo de límites ni programas de acceso a viviendas populares por parte del Estado.
