Cofundadora de Black Lives Matter renuncia luego de revelarse sus propiedades por más de U$S 3 millones de dólares

Patrisse Cullors, cofundadora del movimiento estadounidense Black Lives Matter, anunció su renuncia al cargo de directora ejecutiva de esa organización, en medio de fuertes críticas tras revelarse que posee una ostentosa cantidad de lujosos inmuebles, por más de tres millones de dólares. La activista, de 37 años, que ha estado al frente de Black Lives Matter Global Network Foundation durante casi seis años, afirmó por su parte que se retira del movimiento para “enfocarse en otros proyectos”, que incluyen el lanzamiento de su segundo libro y un acuerdo televisivo con Warner Bros.

“He creado la infraestructura y el apoyo, y el esqueleto y los cimientos necesarios para poder irme. Siento que es el momento adecuado”, dijo Cullors, asegurando que su renuncia no estaría relacionada con el reciente escándalo.

Su salida de la organización ocurre en medio de una controversia sobre las finanzas de la organización a la que se sumó el conocimiento de la riqueza personal que ha adquirido en el último tiempo.

Cullors, autodenominada “líder marxista”, enfrentó una ola de críticas tras darse a conocer que había adquirido cuatro inmuebles de lujo valorados en 3,2 millones de dólares, lo que llevó a muchos a cuestionar qué porcentaje de las donaciones recibidas por BLM se destinaban realmente a “programas de justicia social”, como afirmaba la entidad.

Black Lives Matter recibió solo en 2020 unos U$S 90 millones de dólares en donativos, luego del asesinato del afroamericano George Floyd, y tras gastar casi una cuarta parte de los ingresos en costos operativos y “acciones de caridad”, cerró el periodo con un saldo de 60 millones de dólares, por lo que los críticos del movimiento sostienen que ese dinero debería haber sido destinado a las familias de víctimas de la brutalidad policial que no han podido contar con la ayuda necesaria.

También los familiares de las víctimas de la violencia policial empezaron a criticar a la organización. Tamika Palmer, la madre de Breonna Taylor, la joven de 26 años muerta en un tiroteo provocado en marzo de 2020 por policías de Kentucky sostuvo: “Nunca he tratado personalmente con la plataforma de BLM de Louisville y creo que son un fraude”. Lisa Simpson, madre de Richard Risher, un joven de 18 años asesinado por la policía en California en 2016, también acusó a Cullors: “Llevo cinco años tratando de hablar con ella. Nunca la he visto en mi vida en Los Ángeles y eso que ahí nací y crecí”.

Tanto Simpson como Palmer se quejaron de no haber recibido apoyos económicos de la organización, que tiene una caja millonaria gracias a los donativos recibidos, principalmente de empresas y celebridades. Situación que contrasta con la compra, por parte de Cullors de al menos tres casas entre 2016 y 2020 por varios millones de dólares. En abril, The New York Post afirmó que la activista adquirió otra residencia de 1,4 millones de dólares en Los Ángeles.