Una empresa argentina comenzó a desarrollar “chips subcutáneos” para portar el “pasaporte sanitario” Covid, que certifica el estado vacunatorio de la persona, siguiendo así lo que ya empezó a aplicarse en Suecia.
Marcelo Trejo, director de la empresa argentina Animaco, que expresó: “Esto que tenemos acá es un microchip implantable, es un dispositivo como una microcomputadora donde tenemos adentro una memoria, una antena que se coloca en la mano derecha de la persona, el médico lo coloca de manera subcutánea con 5mg de anestesia local y a partir de ese momento ya estás chipeado y podés empezar a interactuar con los teléfonos dispositivos móviles o tu computadora”
Y añadió: “En este momento estamos trabajando mucho con el ‘pase sanitario’ para el Covid. De esta manera vos tenés en tu mano derecha el implante y en cualquier lugar donde se solicite el permiso, con un simple teléfono que tenga conectividad NFC o una computadora, pueden leer los datos personales”.
“Tenés información privada que podés guardar ahí, información sensible, el microchip funciona como un trigger para un control de acceso y poder acceder a lugares como bóvedas, tu oficina, tu hogar, tu vehículo y más allá de eso tus historiales clínicos, que es lo último en lo que estamos trabajando y más relevancia tiene”, sostuvo con respecto a sus usos.
Trejo explicó que el microchip, “tiene un valor aproximado de 200 dólares y la colocación ronda entre los 30 y los 50 dólares”
En su sitio web, la empresa Animaco explica que la tecnología “NFC de Comunicación a campo cercano”, “Es una tecnología que aplica al transhumanismo, el cual pretende usar la tecnología a favor del cuerpo humano. Se podría decir que es apenas el inicio de la evolución artificial. Así como hoy con nuestros chips podemos interactuar mediante celulares, computadoras, controles de acceso privados, criptomonedas e incluso obtener un historial clínico a resguardo, estamos trabajando para que pronto podamos vincularnos con sistemas mas avanzados, llevando la seguridad y la privacidad a un nivel inimaginable”.
Al igual que el “pase sanitario” que hace varios meses se veía como un dispositivo “conspiranoico” que solo implementaban unos pocos países y ahora ya se aplica en casi todo el mundo, es solo una cuestión de tiempo para que el “estado de excepción” termine solicitando alguna medida de esta naturaleza, bajo el argumento de evitar la adulteración de permisos. Como en un sistema de “ventana de Overton”, cada día que pasa, lo que puede parecer distópico e inverosímil en un primer momento, pasa a ser algo factible, para finalmente volverse obligatorio. Mientras tanto, los dispositivos de vigilancia y control, se incrementan y sofistican ante la impávida vista de todos.
Puede ver en el siguiente video al director del proyecto:
Si Youtube decide borrar el video, puede verse también en Odysee: