Macri avanzará con la intromisión de las FFAA en la seguridad interior, especialmente en tareas de inteligencia y de refuerzo represivo si las fuerzas de Policía, Gendarmería y Prefectura se vieran superadas en escenarios de fuerte crisis social. Para este cometido evalúa derogar el decreto 727/2006 de Néstor Kirchner que reglamentó la Ley de Defensa y que establece que “el sistema de defensa debe orientarse estructural y organizativamente hacia la conjuración de situaciones de agresión externa perpetradas por Fuerzas Armadas de otro Estado”, evitando de ese modo pasar por el Congreso Nacional.
De acuerdo a este plan, Macri aprovechó la jornada para pedir que las Fuerzas Armadas realicen “más esfuerzos en la colaboración con otras áreas del Estado” y “brindar apoyo logístico a las fuerzas de seguridad para cuidar a los argentinos frente a las amenazas y desafíos actuales. Necesitamos Fuerzas que se adapten a las amenazas del siglo 21 y que estén preparadas para enfrentar los problemas que hoy nos preocupan”.
Participaron los ministros de Defensa, Oscar Aguad, y de Seguridad, Patricia Bullrich; el secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis, y el jefe del Estado Mayor del Ejército, general de brigada Claudio Pasqualini.
La titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela De Carlotto, se refirió a la posible asignación de roles por parte del gobierno a las Fuerzas Armadas, quienes volverían a intervenir en cuestiones de seguridad interior: “Es muy peligroso, quieren volver a la teoría del enemigo interno, van a perturbar la paz”.
Puede ver la parte central de su discurso acá: