Más de un millón de personas en el Líbano se vieron obligadas a desplazarse de sus hogares por los continuos bombardeos de Israel en todo el país, mientras aumentan las tensiones por una posible invasión a gran escala, según indicó este lunes un informe de Naciones Unidas.
Según la Luna Roja siria, más del 60% de las personas que llegan a los pasos fronterizos sirios desde el Líbano son niños. «El sufrimiento que experimentan las mujeres y estos jóvenes en particular, en medio del miedo, la ansiedad y la espera en condiciones difíciles no se puede medir en números», indicó la organización.
Ya unos 100.000 desplazados llegaron a la vecina Siria en los últimos días, informó el alto comisionado de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Filippo Grandi, en una publicación en X.
Grandi agregó que los equipos de la ACNUR, junto con miembros de la Media Luna Roja siria, están desplegados en cuatro puntos fronterizos dentro de Siria «para apoyar a los recién llegados».
Además, unos 37 centros de salud se han visto obligados a cerrar, y tres hospitales que trataban a pacientes han sido evacuados.