Tras la invasión israelí con tanques y vehículos blindados a varias localidades de Al-Quneitra, en los altos del Golán de Siria, las fuerzas armadas sionistas procedieron a la destrucción de calles, redes de suministro de agua y electricidad. La acción del ejército israelí sería en respuesta a que un gran número de residentes de Al-Quneitra se negó a atender el llamado para evacuar sus tierras.
Los medios locales informaron este domingo que las fuerzas israelíes dañaron las redes de suministro de agua y las líneas eléctricas en dicha provincia suroccidental siria en un intento deliberado de cortar el soporte vital a las zonas que habían ocupado recientemente.
En la ciudad de Al-Hamidiya, las tropas de ocupación destruyeron los postes de electricidad, luego de haber invadido el sábado un centro de mando vacío del Ejército sirio en esta ciudad en busca de armas.
A primeras horas de hoy domingo, el régimen israelí también lanzó ataques aéreos contra las afueras de Damasco, al tiempo que ha destruido almacenes y lanzadores de misiles cerca de Qastal, en la zona de Al-Qalamun, al norte de la capital de Siria.
Israel inició su ofensiva para apoderarse de más territorio sirio el 8 de diciembre, después de que militantes apoyados por el extranjero y liderados por el grupo terrorista Hayat Tahrir al-Sham (HTS, ex Frente al Nusra, rama de Al Qaeda) anunciaran la caída del gobierno del presidente Bashar al-Asad tras un rápido ataque de dos semanas.