El grupo terrorista HTS, rama de Al Qaeda en Siria, ahora controlante del Gobierno, tras el derrocamiento de Bashar al Assad, sostuvo que las nuevas autoridades sirias no dejarán usar el territorio nacional para ataques contra Israel. Así lo manifestó Abu Mohamad Jolani, uno de los líderes de las facciones armadas que tomaron el poder en Damasco en una entrevista exclusiva con el diario británico ‘The Times’.
«No queremos ningún conflicto, ni con Israel ni con nadie más, y no permitiremos que Siria sea utilizada como plataforma para lanzar ataques. El pueblo sirio necesita un respiro, los ataques deben terminar e Israel tiene que retroceder a sus posiciones anteriores», declaró. «La justificación de Israel fue la presencia de Hezbollah y de las milicias iraníes, así que esa justificación ha desaparecido», agregó.
También sostuvo que en el nuevo gobierno están «comprometidos con el acuerdo de 1974» y «dispuestos para que vuelvan observadores de la ONU».
Jolani es el jefe del grupo Hayat Tahrir al Sham (HTS, anteriormente Frente al Nusra) que lideró la ofensiva relámpago de una coalición de fuerzas antigubernamentales que derrocaron al presidente Bashar Asad.
Desde la caída de Asad el 8 de diciembre, Israel bombardeó más de quinientos objetivos militares en territorio sirio, destruyendo buena parte su flota y fuerza aérea y extendió las zonas que controla en la meseta del Golán, bajo pretexto de defender su seguridad nacional.
Frente a esta clara violación de la soberanía siria, el nuevo gobierno ha mantenido silencio y ha prometido no atacar a Israel.