Como venimos anticipando, detrás de la “Causa de los Cuadernos” se esconden objetivos extrajudiciales de los EEUU: dejar fuera de competencia a dirigentes no confiables para su geopolítica y abrir el camino a las grandes corporaciones constructoras norteamericanas, actualmente desplazadas por empresas locales, como Techint, una de las principales compañías del país.
Por este motivo, y como era previsible, el juez cercano a la Embajada de los EEUU, Claudio Bonadío procesó a Paolo Rocca, el dueño de Techint, lo embarga por $4000 millones y le prohibe la salida del país mientras que en simultáneo, desde EEUU se hace saber que se le ha retirado la visa y que Techint está siendo investigado por la SEC (U. S. Securities and Exchange Commission).
Quien llamativamente no resultó afectado por la nueva disposición de Bonadió es Marcelo Mindlin, el aparente comprador de IECSA de Ángelo Calcaterra y de quien muchos sospechan viene actuando como testaferro de Mauricio Macri, obtvo del juez la falta de mérito. Este hecho acrecienta las versiones que contaban que Rocca le habría dicho al embajador ruso que temía que Macri buscaba quedarse con sus empresas.
Si bien Rocca venía escapando del procesamiento y había sido Luis Betnaza, el director de la compañía, quien había tenido que lidiar con esa situación judicial, ahora ya nadie descarta que ambos pudieran finalmente terminar presos. Rocca y Betnaza quedaron involucrados en el supuesto pago de coimas a ex funcionarios argentinos para que intermediaran con el gobierno de Venezuela en el contexto de la estatización de la empresa Sidor, propiedad de Techint, en aquel país. ¿Se animará Bonadío a aplicar la doctrina Irurzun que ha venido implementando contra políticos y empresarios, deteniendo “preventivamente”, considerando la capacidad de “obstaculizar” al Poder Judicial dados los contactos del implicado?
Habrá que ver cómo esta nueva avanzada judicial sobre el poder económico local se refleja en el plano político, ya que es sabido que una parte del partido radical, bajo el ala de Ernesto Sanz, supo ser muy cercano a Paolo Rocca. ¿Habrán esta vez de reaccionar para defender a su mecenas o continuarán apostando al perfil bajo y al seguidismo del PRO como han venido haciendo? ¿Habrá algún movimiento en el plano del propio poder judicial, siguiendo los recientes cambios en el Consejo de la Magistratura? ¿Se quedará tranquilo Rocca con este procesamiento y eventual encarcelamiento? Hay que recordar que muchos sindican al poder Rocca detrás de Duhalde y Alfonsín en los sucesos que terminaron con la caída de De la Rúa.
No puede escapar tampoco al análisis el hecho de que Techint se haya acercado estos últimos días a Cristina Kirchner, según relató el domingo pasado Horacio Verbitksy: “El gobierno enfureció en los últimos meses, cuando sus servicios detectaron contactos de los principales lugartenientes de Rocca con el kirchnerismo: Luis Betnaza visitó el Instituto Patria y Daniel Novegil se encontró con Axel Kicillof”.
Las reglas del poder indican que el terreno que algunos dejan de ocupar, pasa a ser aprovechado por otros. Sea en la economía o en la política. El poder judicial actúa luego como el brazo ejecutor en el plano legal-institucional, reflejando las nuevas relaciones de fuerza.
