Al igual que Macri, su socio detrás del trono, el empresario Paolo Rocca, dueño de Techint, aparece ahora denunciado por montar una red de sociedades offshore para manejar dinero en negro y pagar coimas. Así aparece en investigaciones judiciales de Brasil, Italia y Suiza.
Así lo revela la periodista Emilia Delfino: “Los hombres de Techint involucrados son en su mayoría argentinos y operaron desde Buenos Aires. Los arrepentidos y testigos declararon que las órdenes procedían de Argentina, donde se encuentra el centro operativo del grupo. Uno de los colaboradores, además, contó cómo supuestamente entregaba efectivo negro en la sede de Techint en Alem 1067. El destape de esta historia comenzó en Brasil. Noviembre de 2014. Los magistrados del Lava Jato ordenaron la detención de Renato de Souza Duque, director de la división de servicios de Petrobras entre 2003 y 2012, acusado de cobrar sobornos. Unos meses más tarde, su amigo Joao Antonio Bernardi Filho confesó haber sido el testaferro de Duque y haber administrado los sobornos que el funcionario de Petrobras recibía de empresas contratistas de la petrolera estatal a cambio de obras millonarias. Una de las empresas señaladas fue Techint. La filial de la ítalo-argentina en Brasil llegó a vender tubos y caños a Petrobras por más de US$ 1.600 millones”.
Y abunda en detalles sobre la estructura financiera: “El testaferro de Duque canalizaba el dinero a través de una sociedad creada en Uruguay: Hayley SA. La compañía simulaba contratos de servicios ficticios con las constructoras. Luego los millones llegaban a una cuenta en Suiza en la Millennium BCP Banque Privée y desde allí a la sucursal de Hayley en Brasil, donde Bernardi compraba propiedades: 12 inmuebles en total y otro millón y medio en un fondo de inversión. Las cuentas bancarias de estas empresas en Suiza estaban manejadas por integrantes de Techint”.
La investigación afecta a varios argentinos del Grupo Techint: “De acuerdo con los documentos bancarios, las personas con poderes sobre las cuentas de Fundiciones del Pacífico SA y Emprendimientos Siderúrgicos eran, al menos hasta fines de 2015, los argentinos Héctor Alberto Zabaleta (director de Administración de Techint), Fernando Segundo Prado (abogado de Techint), Carlos Enrique Rodríguez (abogado de Techint) y el italiano Umberto Bocchini (ejecutivo de Techint). El dinero se movía entre cuentas del mismo banco suizo: BSI. Luego, las offshore transferían fondos a Hayley, en otro banco suizo. Todas las transferencias se justificaban con contratos de consultoría, pero para la Justicia de Milán y Brasil esos servicios eran ficticios. Hayley nunca tuvo personal. Las cuentas eran manejadas por tres colaboradores de Techint en Suiza. Ana María Giorgetti es una de ellas. Las órdenes de pagos las recibía siempre de otro ejecutivo del grupo, el argentino Héctor Alberto Zabaleta, entonces director de Administración de Techint en Argentina y uno de los hombres de mayor confianza de los Rocca. Lleva en la compañía 48 años y figura en los directorios de al menos 30 sociedades en Argentina, casi todas vinculadas a Techint y sus ejecutivos, incluido Paolo Rocca”.