CFK durísima contra el Gobierno: “No importa la persecución, si creen que me van a asustar, qué equivocados que están (…) que no sean necios”

Cristina Kirchner se presentó en Esteban Echeverría, donde se refirió al problema de la desocupación, que cada día angustia a más personas en la Argentina:

Siempre nos hicimos cargo de todo: de la deuda que otros habían contraído, de levantar de nuevo las fábricas. Siempre hay dificultades pero por qué razón se empecinan en tirar todo abajo, en seguir endeudando a la Argentina, están endeudando a nuestros hijos, a nuestros nietos.

Hubiera sido más fácil quedarme donde estaba. Me había ido ese 9 de diciembre diciendo que ojalá el gobierno que me sucedía cuando le tocara finalizar su mandato fuera despedido por el pueblo.

Vengo a ser una voz, que junto a miles de ustedes, se unan en un grito diciendo que las cosas no están bien, que no sean necios, que no podemos seguir cada día abriendo un diario y enterándonos, en realidad cuando abrimos un diario uno no se entera de nada, me corrijo…

Son los intendentes los que le están poniendo el pecho a los desastres en materia de desocupación, con recursos municipales porque no les pasan un mango de arriba.

El otro día estaba en Lomas de Zamora y veíamos a los jubilados y quiero unirme a las voces que reclaman que a nuestros viejos no les alcanza la plata para comprar los remedios. Remedios carísimos como los oncológicos, los de HIV, es imposible que la gente pueda hacer frente a esos remedios si el Estado no los ayuda. No puede ser que la luz, el gas se conviertan en servicios de lujo si nunca lo fueron en la Argentina, son servicios públicos de acceso a la sociedad.

Por eso estoy hoy acá, junto a todos ustedes, no importa la persecución, si creen que me van a asustar, qué equivocados que están. No me conocen. Después de haber sido tantos años legisladora y presidenta de la República, cada vez que he tomado una decisión lo he hecho pensando en el pueblo, en los comerciantes argentinos que necesitan consumo y demanda.

Los convenios colectivos que mejoraban todos los años, los salarios, las netbooks, los libros, todo eso formaba parte de una Argentina que crecía, que necesita continuidad en las políticas públicas. No podemos andar a los bandazos, diez o doce años y luego “otra vez sopa”.

Miren que me hicieron movilizaciones, muchos que se quejaban por el impuesto a las ganancias. Muchos que dijeron cualquier cosa en cualquier lado. No me arrepiento nunca de haber dejado que me insulten. Porque quiero vivir en un país libre. Tengo a mis hijos y a mis nietos y  a ustedes. Por ellos quiero que vivan en un país con muchas libertades y democracia. Cuando yo era joven, hace mucho tiempo, no se podía hacer política, estaba prohibido decir lo que uno pensaba. No tenemos que vivir en una sociedad con miedo. No tengo miedo, exprésense con libertad, como siempre lo han hecho. Es muy feo vivir con miedo.

En esta hermosa tarde quiero también junto a ustedes preguntar dónde está Santiago Maldonado. No es una pregunta que deba responder una sola persona. Debe ser una pregunta que deben responder todas las instituciones de la República, porque todas ellas son garantes de la vida, de la libertad y de la seguridad de cada uno de los argentinos y argentinas.

Les dije que siempre iba a estar junto a ustedes, en el rol que me toque, no se me caen los anillos, si tengo que estar en este lugar y si mañana tengo que ir a barrer la vereda iré a barrer la vereda también. Conmigo cuenten para todo, como siempre.

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