Australia dio a conocer cómo se verá el “campo de aislamiento” para 1,000 personas a las afueras del aeropuerto de Wellcamp en la localidad de Toowoomba. Dos meses después de que comenzaran las obras de construcción, el gobierno de Queensland explicó que la instalación dispondrá de 500 camas operativas para fines de diciembre de 2021. El gobierno está construyendo otra instalación de cuarentena de 1,000 camas en Queensland en un cuartel del ejército de 30 hectáreas en la zona industrial de Pinkenba, cerca del aeropuerto de Brisbane.
En esta primera etapa, las casillas de aislamiento serán utilizadas por viajeros nacionales que regresen de los lugares sospechosos de Covid aunque los propósitos finales se desconocen, por lo que los críticos acusan al gobierno de estar construyendo campos de concentración de personas bajo la excusa del coronavirus. Cabe recordar que el Estado australiano ha sido especialmente estricto con las restricciones por Covid y ha reprimido en innumerables ocasiones las manifestaciones públicas que han resistido a las mismas.
El viceprimer ministro Steven Miles visitó el lugar para presenciar la obra: “Las casillas se instalarán con grúa en las próximas dos semanas y las cosas seguirán avanzando muy rápido aquí en el sitio”, dijo. Miles dijo que se esperaba que la instalación estuviera terminada a fines de marzo del próximo año.
Los planes de Wagner Corporation, publicados por el gobierno estatal, muestran casillas divididas en diferentes zonas, con capacidad para individuales, dobles, habitaciones familiares y opciones de accesibilidad. Los planos también muestran detalles clave como dónde se ubicarán las habitaciones, el centro de tratamiento médico y la cocina. Las oficinas de seguridad y policía también estarán ubicadas en el sitio.
“Hemos estado colaborando estrechamente con las empresas locales, no solo sobre cómo pueden contribuir a la construcción, sino también sobre cómo pueden beneficiarse de las operaciones en curso de las instalaciones de alojamiento”, dijo Miles. “De modo que podemos asegurarnos de que, en la medida de lo posible, los servicios, los alimentos y los demás suministros sean de origen local, proporcionando beneficios económicos locales y puestos de trabajo locales”, añadió.
El presidente de Wagner Corporation, John Wagner, dijo que estaba satisfecho con el progreso del proyecto: “Todo va muy bien (…) Estamos muy avanzados y estamos trabajando en los espacios subterráneos. El edificio está avanzando muy bien”.
“Habrá escuchado los criterios muy estrictos sobre quién calificará [para la cuarentena domiciliaria], por lo que seguirá habiendo personas de los puntos críticos que podrían necesitar ir a un alojamiento más seguro”, dijo. Y apuntó a las personas “que vienen de otras partes del mundo donde el COVID sigue siendo desenfrenado, donde puede haber nuevas cepas, donde es posible que no hayan tenido acceso a la vacunación”. “Anticipamos que habrá una necesidad continua de instalaciones de cuarentena”, afirmó.
La ministra de Salud, Yvette D’Ath, dijo que la construcción de estos campos “significa un menor riesgo de propagación de COVID desde instalaciones que nunca fueron diseñadas para una cuarentena segura”.
Inicialmente se arrendará la tierra a los Wagner por 12 meses. “Tenemos la opción de mantenerlo por otros 12 meses. Y luego entiendo que Wagner tiene planes sobre cómo podrían usar la instalación de manera continua“, dijo Miles.
