Absolvieron al ex jefe del Ejército, César Milani, y ordenaron su “inmediata libertad” en la causa que lo investigaba por su presunta participación en delitos de lesa humanidad en la provincia de La Rioja.
Milani era subteniente del Batallón 141 de La Rioja cuando en 1977 fue secuestrado Pedro Olivera, funcionario de la municipalidad de la capital de aquella provincia, y su hijo, Ramón Olivera. De acuerdo a este último, Milani habría estado a cargo del operativo. La querella, que integran la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y de la provincia, había pedido 18 años de prisión.
El Tribunal Oral de La Rioja determinó en cambio su absolución y dispuso su libertad.
“Estoy de pie, no me van a quebrar”, expresó Milani antes de escuchar la sentencia, y sostuvo que el proceso judicial fue “producto de una campaña política, mediática y judicial inédita contra un jefe del Ejército (…) para ahogar el último intento de construir un Ejército nacional y popular”, explicando que ahora, “otra vez hay un Ejército de rodillas, lejos del pueblo y cumpliendo roles y objetivos secundarios que interesan a las potencias extranjeras”.
“Siento que con las acusaciones, calumnias e injurias hacia mí y las convicciones nacionalistas que represento, seguido de mi privación de la libertad y el sometimiento de este proceso, se ha pretendido ahogar, quizás, el último gran intento de lograr un Ejército defendiendo los grandes proyectos nacionales y populares, como lo soñaron nuestros verdaderos héroes, nuestros caudillos federales y nuestros grandes líderes populares como el general (Juan Domingo) Perón”, explicó.
“Simplemente voy a utilizar estas últimas palabras para reafirmar mi firme convicción de que con mi injusta y arbitraria detención y las falsas acusaciones que vengo sufriendo hace seis años, más que hacerme un daño a mí, se le ha infligido un castigo al Ejército argentino, privándolo de la posibilidad de una reconciliación definitiva con el pueblo del que se nutre”, expresó.
“Creo firmemente en Dios, que algún día juzgará nuestros actos. Por eso, estoy tranquilo vistiendo con orgullo el uniforme de la Patria, seguro de que me asiste la verdad y la razón. Espero que a partir de hoy también la Justicia, con un veredicto de absolución que reivindique mi buen nombre y honor, así como el de mi familia, que ha sido siempre mi sostén. A pesar de todas las difamaciones, calumnias, injurias, de la injusta detención y proceso, el ataque sistemático de los poderes fácticos”, manifestó Milani, reafirmando así su inocencia.
El ex jefe del Ejército tendrá que afrontar en septiembre su defensa por el caso del conscripto Alberto Ledo, desaparecido durante el Operativo Independencia, en el que está acusado y por la que seguirá detenido y una causa por enriquecimiento ilícito ante el juez federal Daniel Rafecas.
Milani, general especializado en inteligencia, había sido elevado al rango de jefe del Ejército por Cristina Kirchner como forma de contrarrestar el aparato montado desde la SIDE por Antonio Stiuso.
