Con esta cuarta tanda de material desclasificado, EEUU completa su “Proyecto de Desclasificación” sobre la última Dictadura Argentina y el Plan Cóndor, con unas 43.000 páginas de información de sus distintas agencias gubernamentales, buscando lavar su imagen, luego de haber sido el principal impulsor detrás de los golpes de Estado en América Latina.
Si bien desde la Embajada de los EEUU se encargan de exteriorizar que la entrega de documentos “refleja el compromiso histórico del gobierno de Estados Unidos con la transparencia, la responsabilidad y los derechos humanos”, lo cierto es que esto es una gran hipocresía, ya que fue el propio Estado norteamericano el que promovió la red de dictaduras militares a lo largo y ancho de América Latina, coordinada por la CIA y personajes que siguen teniendo un enorme poder, como Henry Kissinger. Es claro que EEUU no realiza estas “desclasificaciones” por motivos humanitarios, de transparencia ni de derechos humanos, sino simplemente para intentar mejorar su propia imagen pública.
A nadie escapa que estas desclasificaciones se realizan luego del previo descarte de toda aquella información verdaderamente comprometedora para los EEUU. Más allá de esto, el material puede resultar de utilidad en muchos de los juicios por delitos de lesa humanidad que se vienen llevando a cabo.
Esta cuarta entrega incluye unos 5600 documentos que contienen, entre otros, 2100 archivos del Departamento de Estado.
Un documento, fechado el 24 de julio de 1976, expone que el objetivo del Plan Cóndor era “eliminar los líderes terroristas de América Latina”. Otro documento, del 28 de septiembre de 1976, plantea que la Operación Cóndor “tiene su centro en Chile” y que se propone combatir al “terrorismo marxista”. Sin embargo, la realidad histórica demuestra que la mayoría de los desaparecidos eran delegados gremiales y las cúpulas de las organizaciones guerrilleras en buena parte huyeron del país.
Otro documento, del 16 de febrero de 1977, sostiene que los países que integran el Plan Cóndor acuerdan la “Operación Teseo”, para actuar en Francia eliminando a quienes allí se habían refugiado. Sin embargo, es de público conocimiento el amigable encuentro en París entre Emilio Eduardo Massera y el jefe de Montoneros, Mario Firmenich, en 1978, tal como denunciaron Elena Holmberg, antes de terminar también desaparecida y el escritor y ex integrante de Montoneros, Juan Gelman.
En una nota casi de color, si no fuera por lo macabro del tema, el 15 de mayo de 1977 un grupo de generales argentinos se quejan ante el Departamento de Estado por no recibir igual trato hacia ellos que el gobierno de Israel que usaba igual violencia contra los palestinos.
El material desclasificado puede consultarse y descargarse completo desde la siguiente dirección:
https://www.intel.gov/argentina-declassification-project/records
El documento sobre la “Operación Teseo” puede verse acá:
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