Pasó el Council of the Americas por Buenos Aires, una institución creada por David Rockefeller en 1965 para coordinar la política y la economía en América Latina en pos de lograr mayores beneficios para las corporaciones transnacionales.
Reforma Laboral
Uno de los temas más conversados por los empresarios reunidos fue la “necesidad” de una reforma laboral luego de las elecciones de octubre similar a la aprobada en Brasil, si bien no con la misma profundidad. Daniel Funes de Rioja, presidente de la Organización Internacional de Empleadore, dijo sobre el tema: “No podemos ir a una reforma a la brasileña. Los argentinos tenemos otra idiosincrasia y la mayoría de los cambios que se aprobaron allí no sería factible introducirlos aquí. Hay algunos temas urgentes que deben ser abordados. Una rebaja en serio de los aportes patronales para bajar el costo laboral. Flexibilizar las condiciones de contratación y despido, porque si no será imposible generar empleo. Y descentralizar las negociaciones colectivas, para discutir por empresa o por sector”.
Los miembros del gabinete nacional, como Marcos Peña, disertaron en torno a afirmaciones un tanto falaces sobre el devenir político y económico:
-Se habló de una “mejora macroeconómica”, pero no se habló del creciente endeudamiento y el creciente déficit fiscal y comercial (algo raro para economistas neoliberales que siempre hicieron de los déficit estructurales su principal caballito de batalla).
-Se llegó a hablar de una supuesta “recuperación económica de Brasil”, algo que es falso, ya que el país carioca cayó 10% el año pasado y éste solo creció 0,5%, con lo que a lo sumo frenó su estrepitosa caída.
-Se realizó una reivindicación de una supuesta “disminución a la mitad de la inflación”, cuando en realidad en 2017 es igual a 2015, a dos años de haber asumido, solo se bajó del 40% al que el mismo gobierno la llevó en 2016.
-Permanentemente se habló de la necesidad de lograr un “crecimiento sostenido” abandonando incluso la ya de por sí cuestionable idea de “desarrollo sostenido” (que suele excluir del análisis la vida digna de los trabajadores).
El Ministro de Energía, Aranguren, anunció un nuevo Tarifazo para después de las elecciones de octubre: “Hacia fin de año, en noviembre o diciembre, como estaba previsto, haremos una revisión integral de las tarifas. Ahí se definirá la magnitud de los aumentos dependiendo del costo de la energía”.
El Ministro de Hacienda, Dujovne, planteó que se enviarán luego de las elecciones dos proyectos de ley al Congreso: una “Ley de Responsabilidad Fiscal” para controlar el déficit y una “Reforma Tributaria” que consistirá en un “esquema gradual de reducción de alícuotas impositivas”, obviamente para los más ricos.
Alejandro Werner, representante del Fondo Monetario Internacional en Occidente, elogió al gobierno macrista: “vemos una transformación muy importante que se está llevando hoy en Argentina y un proceso de ordenamiento macroeconómico que pasa por el establecimiento de una política monetaria independiente y un esquema de flotación de tipo de cambio que ha sido muy exitosa en la región”.
Susan Segal, la presidenta del Council of the Americas, tampoco ahorró elogios para Macri: “Otra cosa que hoy en día está a la vista es que no sólo es líder en la parte económica. El presidente Macri es un líder político en América latina”.
La “disidencia controlada” fue representada por Juan Manuel Abal Medina y Rodolfo Urtubey. Abal Medina afirmó en referencia al proyecto macrista de reforma tributaria: “Venimos trabajando con Luciano Laspina (PRO). Estuvimos viendo con el staff del gobierno todos estos problemas. El problema no es la presión tributaria sino la naturaleza de esa presión y la calidad de los bienes públicos que el Estado genera con esa presión. Coincidimos con Luciano en que es una estructura muy inequitativa y que se superpone de manera contradictoria. Hay que avanzar de forma gradual, atando las metas al cumplimiento. Es muy importante el consenso político, por eso celebramos esta comisión. Hay que reemplazar impuestos indirectos por directos“. Mientras que Urtubey, senador nacional y hermano del gobernado salteño dijo: “necesitamos lograr un consenso, una cultura del consenso. Coincido en todo con Luciano Laspina. Hay que aliviar cargas sociales de quienes producen. Apostemos al crecimiento económico y no aumentar carga fiscal que ya es insoportable para las empresas”.
Mientras el diputado PRO Laspina promovió una “reforma política” con voto electrónico, Urtubey apoyó esta idea: “Hay que insistir en la reforma política. Estas elecciones últimas han mostrado las falencias del sistema”, mientras que Abal Medina se limitó a decir “Me sumo a lo que dijo Rodolfo sobre reforma política”.
Como comentamos en nuestra anterior nota sobre esta institución, el Council fue auspiciado por lo más granado de la élite empresarial corporativa transnacional:
